Devendra Banhart

Leo en "El País" hace unos días que: "Los nuevos representantes del nuevo folk son José González, sueco de origen argentino; CocoRosie, las excéntricas hermanas Bianca y Sierra Cassidy, estadounidenses de sangre cherokee, y el tejano de origen venezolano Devendra Banhart, heredero del hippismo y cabecilla del movimiento".


Devendra Banhart estuvo en San Sebastián hace un par de semanas dando un concierto en el Gasteszena, en el barrio de Egia -este local es bastante pequeño, tiene un aforo de 700 personas tan sólo, pero en él se han citado artistas que comenzaban hace años como unos jovencísimos Dover o los debutantes Hooverphonic, cuya cantante, Gelke, se mostró realmente sorprendida de que la conociéramos aquí al pedirle un autógrafo-.



El concierto de Devendra Banhart fue bastante especial, como la propia personalidad del cantante. Habló mucho entre canción y canción e incluso preguntó si había alguien entre el público que escribiera canciones y quisiera interpretar alguna -Un chaval subió e improvisó sentado en el suelo, con una guitarra del grupo, varias de sus composiciones-.



Lo más sorprendente de Devendra para nosotros fue su gran parecido como banda a los "Led Zeppelin". Había momentos en los que no sabías si estabas en San Sebastián o en el Earl`s Court Arena de Londres allá por el 75 pero como este impresionantemente atractivo admirador de García Lorca reconoce, su música tiene influencias de Os Mutantes, Atahualpa Yupanki o incluso Victor Jara.

Muy recomendables.

Nota: al finalizar el video de arriba sale un menú de Devendra Banhart con otras actuaciones y alguna entrevista.

Sentir la danza y bailar con el alma

Lucía Lacarra presentó el sábado por la tarde en el Teatro Victoria Eugenia de San Sebastián, su espectáculo "Sentir la danza y bailar con el alma", concebido expresamente para dicho teatro. Se presentaron diez coreografías entre clásicas, neoclásicas y modernas.

Lacarra es una bailarina con una trayectoria muy relevante. Nacida en Zumaia (Gipuzkoa) en 1975, dio sus primeros pasos con Víctor Ullate, en cuya compañía estuvo hasta principios de 1994, momento en el que decidió emprender su propio camino, y aceptó la invitación para incorporarse en el Ballet Nacional de Marsella de Roland Petit, en el que siempre interpretó los papeles principales. Tras tres años en esta formación, se consolidó como bailarina principal del Ballet de San Francisco, donde interpretó coreografías desde lo clásico a lo contemporáneo desde 1997 hasta 2002.


Lacarra está considerada como uno de los cuatro bailarines españoles más importantes de la danza clásica del momento, junto con Angel Corella, Tamara Rojo y José Carlos Martínez. Es la única bailarina española que ha logrado el "Prix Nijinsky", el Oscar de la danza. También recibió, en 2005, el "Premio Nacional de Danza", premio de interpretación que se le concedió por "su meritoria carrera desarrollada en importantes compañías de diversas ciudades de todo el mundo y que culminó con su presencia como estrella invitada de la Opera de París, siendo ello un hito en la danza clásica española".


"Lucía Lacarra. Sentir la danza y bailar con el alma" consta de dos partes. La primera comenzó con "Adagio for Strings" coreografiada por Gerard Bohbot y donde la propia Lacarra bailó junto a Cyril Pierre, su partenaire y pareja en la vida real, una pieza que llevan bailando muchos años. Le siguieron Beatrice Carbone y Andrea Volpintesta, primera bailarina y solista del ballet de la Scala de Milán, con "Le parc"; Antonio Márquez y Trinidad Artíguez con "Tientos"; y Luigi Bonino y La Muñeca con "Paso a dos de la muñeca". La primera parte acabó con Lucía Lacarra y Cyril Pierre con "Light Rain", una pieza diferente a lo que hacen normalmente, mucho más exótica (Ver fotos 1 y 2).



La segunda parte comenzó con "La dama de las camelias" de mano de Lacarra y Pierre (Ver foto 3). El resto de piezas fueron: "Charlot y la silla" y "Charlot con las zapatillas de ballet" dentro de Charlot dances avec nous bailado por Luigi Bonino; "La bayadera" con Beatrice Carbone y Andrea Volpintesta; "Zapateado" con uno de los mejores bailadores de flamenco según Lacarra, Antonio Márquez; y acabaron con el ballet de «Thaïs» de nuevo con Lacarra y Pierre.

Crítica

Newport 1965

El próximo miércoles 14 de Noviembre, la 2 de Televisión Española emitirá el mítico concierto de Bob Dylan en Newport en 1965. Como todo lo bueno, será diferido a un horario intempestivo, las 00:30 de la noche. Sin embargo, teniendo en cuenta lo que supuso aquel concierto en la historia personal de Dylan y lo que cambió la música en general, es una cita ineludible para todos aquellos que puedan prescindir de unas horas de sueño.



Corría el año 1965, año del "Highway 61 Revisited". Dylan llegaba de un encuentro con los Beatles, en 1964 -momento en el que les dio a fumar su primer porro-. John Lennon llevaba mucho tiempo deseando conocer a Bob Dylan porque lo admiraba como letrista. En ese encuentro, se produjo un punto de inflexión en la carrera de los Beatles. De hecho, desde ese momento, Lennon y McCartney empezaron a escribir canciones menos pasajeras. También ocurrió en la carrera de Dylan. Los críticos dicen que se volvió eléctrico.

Dylan subió al escenario después de una presentación seguida de una gran ovación pero Joe Boyd, productor del festival, hizo que Dylan sonara algo diferente a lo que tenía acostumbrado a su público: hizo que sonara a Fender eléctrica en lugar de a guitarra acústica. Tras los primeros acordes, sonó una batería y el escándalo se desató, ofendiendo a los puristas del folk.

El Festival de Newport del próximo miércoles es una oportunidad única de ver un momento histórico. No se lo pierdan.